A día de hoy, las encuestas establecen que el 4% de los usuarios de Smartphone protegen su móvil con un software de seguridad. Es un dato interesante, y más teniendo en cuenta que son esas mismas personas las que tienen sus ordenadores completamente protegidos a prueba de bombas y sin embargo descuidan sus móviles casi en su totalidad.
La evolución de las prestaciones de los Smarthphone es muy significativa, actualmente en estos móviles compartimos todo tipo de datos personales y de identidad; contraseña, lista de contactos, cuentas bancarias, etc
Las principales amenazas son los Malwares, Troyanos y otros virus que infectan los smartphones sin que sus usuarios se den cuenta. Algunas consecuencias son:
- Envían virus a otros contactos.
- Bloquean funcionalidades del dispositivo.
- Roban nombres de usuarios y contraseña, entre otros datos importantes almacenados en tu teléfono.
- Etc…
La pregunta realmente importante es ¿cómo protegernos de estas amenazas?. A continuación expondremos algunas reglas básicas para prevenir el contagio de virus indeseados.
1.No abras enlaces con caracteres extraños: si recibes algún link de uno de tus contactos de forma sospechosa asegúrate que realmente te lo haya enviado y no se trate de un virus.
2.Descarga aplicaciones únicamente de tiendas oficiales: hacerlo de otra forma puede conllevar a que virus espías, malwares e incluso troyanos infecten tu dispositivo.
3.Deshabilita la opción de bluetooth de tu terminal: si mediante esta forma estableces conexión con otro terminal y está infectado, el virus se puede propagar a tu móvil.
4.Descarga antivirus de proveedores confiables: algunos de los más conocidos pueden ser Karpesky Mobile Security, Norton Mobile Security, Avast Security Mobile, etc.
5.Limita el uso de tu tarjeta de memoria: intenta no conectarla a otros dispositivos puede que estén infectados y se propage a tu terminal.
6.Realizar copias de seguridad: para mantener a salvo la información y no perderla en el caso de que tu dispositivo se infecte.
Hay un dicho, que dice ¡más vale prevenir que curar!.